Una negligencia alarmante en tiempos de emergencia
En medio de un estado de emergencia por la creciente inseguridad en el país, un suboficial de la Policía Nacional dejó olvidado un fusil AKM cargado con 30 cartuchos en un mercado del Cercado de Lima. El arma fue abandonada en un puesto del mercado Cooperativa de Servicios Especiales 237, en Mirones Bajo, tras el desayuno del agente. Este acto de negligencia no solo pone en duda los protocolos de manejo de armamento, sino que expone a la población a un peligro latente en un contexto ya crítico.
Preocupación vecinal y ausencia de respuestas oficiales
El fusil fue reportado por un colega del suboficial, quien alertó a la comisaría del sector para levantar un parte policial. Sin embargo, la Policía Nacional evitó dar declaraciones sobre el incidente. Vecinos y comerciantes del mercado expresaron su preocupación, resaltando que el hecho ocurrió en plena mañana, con niños y familias transitando por la zona. Este descuido genera cuestionamientos sobre el nivel de preparación y responsabilidad de quienes deben garantizar la seguridad ciudadana.
La imagen policial en entredicho
Este incidente se suma a una serie de episodios que han puesto en duda la actuación de la Policía Nacional en el contexto de la crisis de inseguridad. Mientras el gobierno mantiene un «estado de emergencia» para frenar el crimen organizado, situaciones como esta evidencian fallos internos que aumentan la desconfianza pública en la institución. En momentos donde la población clama por mayor protección, la negligencia en el manejo de armamento agrava aún más la percepción de vulnerabilidad y desorden.